EL CONSUMISMO

El consumo es un acto natural y necesario. El consumismo es un acto artificial que genera problemas que después no puede solucionar. Los sistemas de vida acomodados en diferentes modelos existenciales han sido generados sobre una plataforma que pone las cosas materiales por delante de las verdaderas realizaciones humanas, es decir que las necesidad que tenemos las personas de tener todo lo último, y adquirir las cosas sin saber que las vamos a usar o no, o las compramos para estar a la moda .aunque no sepamos usarlas pero las compramos.

Vivimos en una época especialmente pragmática. Exigimos la máxima utilidad a cambio de nuestra

satisfacción personal. El tiempo es oro. Y el esfuerzo debe ser optimizado. Por ejemplo COCA- COLA. Esta transformación se ha realizado en una fábrica. En ésta, por un lado entró la materia prima y por otro surgió la COCA-COLA. La realidad económica comienza cuando algo entra en el mercado y termina cuando sale. El consumo implica la salida del mercado: alguien adquiere la COCA-COLA, no como materia prima que volverá a sufrir algún proceso, si no como comportamiento final. Fuera del mercado, las personas transforman el alimento en energía y vuelven a entrar en el mercado para transformar su energía en capital.

Cuando hablamos de consumismo estamos en el deber de recorrer dentro de todo un sistema implementado en la sociedad, convirtiéndola en " UNA SOCIEDAD DE CONSUMO". Un dato para ir midiendo lo mencionado anteriormente es que en la actualidad casi un tercio de la población mundial estamos absorbiendo este patrón, principalmente la clase baja y la clase media, los medios de verificación de este planteamiento son cada vez mas claros, desde las comunidades mas pobres hasta el sector medio o casco urbano de un municipio, puesto que no es raro ver en las casa de lamina, plástico con madera en un deterioro casi total antenas de televisión por cable de Tigo, claro o skype, por hacer una mención, también es necesario aclarar que estamos a prueba día a día millones de nosotros en: tiendas, súper mercados, centros comerciales. Con la adquisición de productos de belleza que nos generan seguridad, marcas para crear identidad, regalos para demostrar sentimientos.

Debido a la enorme cantidad y variedad de productos disponibles, los consumidores no pueden satisfacer sus necesidades personales de forma eficaz, y el desarrollo comercial crea constantemente necesidades artificiales. No todos los consumidores son capaces de filtrar las influencias de la industria y del sector de la publicidad. Es por ello que el país necesita información, educación y la toma de conciencia de la diferencia existente entre las necesidades reales y las percibidas, siendo capaz de satisfacer realmente sus necesidades y no necesidades creadas por estímulos externos.

 

CONCLUSIONES

• En definitiva los seres humanos recibimos el impacto directo de todo este modelo voraz y cada vez mas desgastado, entonces como afrontar un problema que tiene de raíz exterioridades como la de la producción masiva sin que exista un mediador del uso de los recursos naturales a nivel mundial,para no seguir acelerando el agotamiento de la era actual. 
• El consumo imparable tiene sus costes. Por un lado, la pequeña porción de la humanidad cuya vida gira alrededor del consumismo se encuentra con una existencia vacía, cuyo único sentido se alcanza consumiendo: trabajar para consumir, consumir para trabajar. La presión psicológica que implica esto supone una merma creciente de la salud mental de las personas.
• Como afrontar los desplazamientos de las etnias nativas, que son desplazadas cada vez más constantes por la extracción de materias primas para la producción de electrodomésticos u otros.
• El consumismo es la introducción al consumo no necesario a través de una larga publicidad que lleva a la compra de productos no necesarios y rápidamente sustituibles por otros, igualmente innecesarios y poco perdurables, con el fin de mantener la producción.

Los mandamientos de la religión del consumo.

1. Amar a Dios-mercado sobre todas cosas.
2. No pensaras durante la liturgia de la compra.
3. Santificaras las fiestas, comprando en los centros comerciales.
4. Honraras a tus marcas.
5. Tendrás fe en las escrituras de la santa publicidad.
6. No tendrás pensamientos impuros sobre tus productos y proveedores.
7. No codiciaras los bienes ajenos, simplemente los compraras.
8. No reutilizaras, no rechazaras y no reciclaras.
9. No desearas a la mujer de tu prójimo, solo a mujer objeto de los anuncios.
10. Te olvidaras de tus necesidades y dejaras que la divina providencia de Dios-mercado se encargue de ellas.
11. Leerás la palabra de dios-mercado en los santos catálogos.
12. No pensaras en nada que no seas tú.

POR: MAURICIO GUTÉRREZ.

Roberto_mauricio7@hotmail.com