37 veces 30 de julio (1975 - 2012)
Olvidar
la sangre derramada es morir en vida o vivir como títeres esclavizados. Era miércoles 30 de julio.
Presidente Coronel Arturo Armando Molina. Ministro de
Defensa, el que después fue presidente Coronel Humberto Romero. Rector de la UES Dr. Carlos Alfaro Castillo.
La década de los años 70´s, El Salvador atravesaba por un periodo de
intensa convulsión política.
Las organizaciones
populares fuertes, de profesores, obreros, campesinos, señoras de los mercados,
estudiantes universitarios y de secundaria, cristianos y otros sectores más, no
se acobardaban frente a la sangrienta actuación de la oligarquía y de sus
instrumentos militares: Ejército, Guardia
Nacional, Policía de Hacienda, Policía Nacional; todos creados, asesorados,
armados, POR LA POLÍTICA EXTERIOR DE ESTADOS UNIDOS (el sector estudiantil privilegiado y
universitario, leamos, estudiemos, investiguemos, reflexiones, porque tenemos
la oportunidad y obligación de redimir la memoria histórica).
Nuestra Universidad (UES) estuvo cerrada por
dos años, de julio 1972 al 1974; se reabrió el año 1975. Existía (ya extinto por temor o domesticación) el llamado desfile BUFO: forma en que el
intelecto, el humor y la sátira intelectual del estudiantado criticaba con
valentía a la tiranía oligárquica militar de ese entonces (a los militares se
les llamaba y aun hoy: GORILAS).
El
desfile BUFO, por las fiestas julias en Santa Ana fue atacado y masacrado el viernes
25 y el martes 29 de julio en el Centro Universitario de Occidente, fueron
decenas de muertos y desaparecidos.
Por tal motivo, en solidaridad y en protesta la UES
Central, San Salvador, se preparó con una manifestación
pacifica desenmascarando la crueldad cometida en Santa Ana (las manifestaciones
del pueblo aunque sean de protesta son pacifica porque no llevan armas. Los militares armados que “acompañan” o
“protegen” o para “prevenir”, son violentos, porque toda arma es violenta,
sirve para matar, aunque sea legal).
Miles de jóvenes estudiantes y profesores valientes
salieron del ALMA MADRE LA CASA DE LA
SABIA MINERVA, de la plaza del derecho, pasando por la escuela España, llegando
a la 25 Av. Norte, pasando frente a la embajada Yanqui (Fuente Luminosa); todos
caminaban con valentía y pureza juvenil, con expresión de fuerza física y de
ideales, por un país mejor, sin tiranías
de perfumados, encorbatados, ni de gorilas uniformados.
Nadie esperaba premios, ni pagos, ni estatuas. Iban llenos y cargados de la moral e ideales
que da la universidad a la juventud: que siendo el presente asegura el futuro
de un país libre y democrático.
Allí
estaban apostados con la oscuridad de sus cascos y uniformes verdes y las negra
boquillas de sus rifles y ametralladoras, monstruosas tanquetas y traidores
franco tiradores que siempre se les llama y se autodenominan: defensores de la
patria, legalizados por su ley, su constitución, su economía y SUS AMOS, esperaban como sombra de muerte y barbarie a
la altura de los Hospitales de Maternidad y Hospital Rosales, colindando con el
paso a doble nivel.
La
historia del 30 de julio, la masacre de más de 60 héroes y de incontables y
desconocidos desaparecidos. Aun no se ha
conocido a cabalidad, lo sucedido. Cada
asesinado y desaparecido tienen nombre y apellido; y el país, que somos todos
nosotros, la sociedad civil y otras organizaciones con inclinación popular,
estamos en deuda; porque esos crímenes están impunes y muchos de los asesinos
aun viven y hasta son jubilados con
pensiones ganadas por haber servido a regímenes criminales y antipopulares.
Hoy
30 de julio, 37 años después (2,012) reafirmamos que la juventud universitaria
no ha muerto, que al rendir tributo a la memoria de nuestros héroes, tomaremos
el ejemplo de organización, de fuerza y acción, para que la casa de Minerva sea
por siempre el Alma Madre que nos nutre, con moral, conciencia, con ciencia, intelectualidad
que nos capacita para tomar compromisos responsables y definidas para construir
un país mejor y diferente. Porque un
país El Salvador para todos, ES POSIBLE.
Hasta hoy, aunque por acuerdo Nº 45/2003-2005,
del 10 de septiembre del 2004 tomado en Asamblea General Universitaria (AGU) que
aun no se cumplido
- Una investigación y un compromiso de presentar demanda para esclarecer los hechos
- Encomendar a la Fiscalía General y a la Comisión de Derechos Humanos de la UES para documentos de lo sucedido el 30 de julio de 1975, aun ni la fiscalía, ni los organismos correspondientes no han hecho lo posible. Este es un llamado a las autoridades universitarias
No
puede haber paz sin justicia
No puede
haber justicia sin libertad.
No puede haber libertad sin igualdad
La
historia exige a la intelectualidad universitaria ser gestores de igualdad,
libertad, justicia para conquistar la PAZ.
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