jueves, 30 de marzo de 2017

Compartimos el mensaje de Monseñor Escobar Alas ante el Papa Francisco en la reciente visita de los obispos salvadoreños al Vaticano. Donde pidió apoyo para prohibir la minería metálica.



sábado, 25 de marzo de 2017

A continuación una producción audiovisual titulada: 
"Romero Inmortalizado" realizado en el año 2014.  

En este documental podemos darnos cuenta que el Beato Monseñor Oscar Arnulfo Romero  ha trascendido las fronteras, disciplinas y también generaciones. 

jueves, 23 de marzo de 2017



37 Aniversario del asesinato de 
Mons. Oscar Arnulfo Romero 
(24/03/1980 a 24/03/2017)
Romero, es un profeta del pueblo: de la verdad, de la liberación…      
Trozos de sus Homilías.

La unidad de la historia profana y la historia de la salvación.
“La historia de El Salvador, con sus próceres, con su política, con sus propias lacras, con sus propias cosas buenas, con sus preocupaciones, es la historia de los salvadoreños y en esa historia de los salvadoreños es donde Dios quiere encontrarse con los salvadoreños y salvarlos.  La Iglesia, como Reino de Dios en esta tierra, ama esa historia, ama a la Patria más que ningún otro”.
(Hom.07 agosto 1977)

Dios quiere su Reino en esta tierra.
“¡Que hermoso sería la fe y la esperanza de los cristianos si se tradujera, no sólo en oración individual, sino también en esta proclamación pública, de que Dios quiere su reino en esta tierra!   Yo quisiera que todos mis queridos hermanos sacerdotes, religiosos, colegios católicos, comunidades cristinas parroquiales, viviéramos esta certidumbre de nuestra fe y de nuestra esperanza”       
(Hom. 7 agosto 1977).

¿En qué consiste, pues, la paz?
“La paz consiste en la sintonía con el plan de Dios.  Cuando una vida, una familia, un pueblo, está en sintonía con la voluntad de Dios, allí hay paz verdadera.  La paz verdadera – y en mi pastoral quiero recalcar este concepto – es cuando la historia de los hombre refleja fielmente la historia de salvación” 
                (Hom. 14 agosto 1977)

Seamos micrófonos de Dios.
“Hay algo que no se puede callar: la conciencia de un pueblo que lleva como micrófono de Dios, la obligación de proclamar aunque no haya emisoras, a todas partes, la libertad del mensaje de Cristo para promover los hombres, para hacerlos verdaderamente hijos de Dios… Cada católico tiene que ser un mártir, un testigo del mensaje que Dios tiene que proclamar libre, ante los hombres”
(Hom. 27 nov. 1977)

La sociedad cristina que Dios quiere.
“No hay personas de dos categorías.  No hay unos que han nacido para tenerlo todo y dejar sin nada a los demás, y una mayoría que no tiene nada y que no puede disfrutar la felicidad que Dios ha creado para todos.  Esta es la sociedad cristiana que Dios quiere, en la que compartamos el bien que Dios ha dado para todos”    
(Hom. 16 Dic. 1979)

No traicionemos la verdad.
“Cuidado hermanos, no quisiera en Quezaltepeque ningún traidor de la Verdad sino hombres y mujeres firmes en su Verdad, como los mártires, aunque nos quiten la vida.  Esta es la verdad: Dios nos dará la vida eterna a cambio de la vida que perdemos en la tierra” 
(Hom. 19 dic. 1977, Quezaltepeque)

Trabajemos por la paz.
“Hermanos, esta es una hora en que Dios quiere muchos hijos suyos trabajando no por la violencia, sino por la paz; haciendo que la paz no sea simplemente apariencia sino que sea obra de la justicia y del amor” 
(Hom. 29 enero 1978)




martes, 21 de marzo de 2017


Hermanos – Amigos – Compañeros
Presente.

Reciban un saludo solidario.

El motivo de la presente es para hacerles la invitación conmemorativa del asesinato del Profeta - Mártir de América Beato Monseñor Oscar Arnulfo Romero.

A continuación de talles de la actividad, de antemano agradecemos.

Comunidades Cristianas.
Gran manifestación popular de fe cristiana, en el 37° Aniversario del asesinato del
“Beato Monseñor Oscar Arnulfo Romero”

Día:         Viernes 24 de marzo de 2017.
Hora:       7:00 a.m. Misa
Lugar:     Altar del Hospitalito de la Divina Providencia
(Final calle Toluca av. Bernal, Col. Miramonte poniente)

Luego saldremos en peregrinación a Catedral (CRIPTA) San Salvador, pasando por la Plaza del Divino Salvador, segunda estación en el Parque Cuscatlán, finalizando en la tumba.

La profecía se ha cumplido “Que mi sangre sea semilla de liberación”

El ejemplo de vida y su palabra profética hizo posible que el Pueblo venciera el miedo e iniciara el camino de liberación.


PEREGRINAMOS:  desde el Hospitalito (Final calle Toluca av. Bernal, Col. Miramonte poniente) a Catedral San Salvador.

¡ ¡ ¡ N o    f a l t e s ! ! !

Invita a tus vecinos, amigos, compañeros.  

jueves, 9 de marzo de 2017

Hermanos – Compañeros – Amigos

Tomando en cuenta el llamado del papa Francisco a proteger la vida humana y el Medio Ambiente, SERCOBA acompañó a la juventud cristiana, religiosas católicas y el Arzobispo José Luis Escobar Alas marchamos hoy (09 de marzo 2017) junto con luchadores sociales desde el capitalino Parque Bolívar a la Asamblea Legislativa, para exigir a los diputados la pronta aprobación de la Ley Contra la Minería Metálica en El Salvador.

Después de una concurrida concentración al pie del monumento a Bolívar y una conferencia de prensa a los numerosos medios de comunicación presentes, marchamos a la Asamblea Legislativa para entregar a los diputados 30 mil 538 firmas como expresión del amplio rechazo del pueblo salvadoreño a la criminal minería en nuestra densamente poblada nación centroamericana. 











 Padre Tilo acompañando durante el recorrido a la Asamblea Legislativa 




Padre Rutilio Grande, 
El Profeta de la Verdad.
Amigo íntimo de Mons. Óscar Romero, Rutilio era un sacerdote muy respetado por sus propios compañeros, que lo nombraron como coordinador del equipo pastoral.
El Padre Grande asumió la conducción de la Parroquia de Aguilares y se dedicó a trabajar con jóvenes, quienes llevaban el mensaje evangélico a las comunidades de base, conformadas por campesinos que estudiaban la palabra de Dios a la luz de la realidad nacional que vivían.
Un tanto reservado en el trato personal, no obstante su timidez, se transformaba en valentía para denunciar cualquier injusticia que le sucediera al pueblo. Captó y respetó la religiosidad del pueblo, pero rompió con una religión conformista que aceptaba la opresión y las injusticias en nombre de los consuelos de la vida eterna.
Trabajó con Comunidades Eclesiales de Base (CEB’s). Su parroquia fue asediada por el ejército y varios miembros de las CEB’s fueron asesinados.  En sus homilías predicaba: "Queremos ser la voz de los que no tienen voz, para gritar contra tanto atropello contra los derechos humanos. Que se haga justicia, que no queden impunes tantos crímenes manchando a la patria, al ejército. Que se reconozca quiénes son los criminales y que se dé justa indemnización a las familias que quedan desamparadas".
No tenemos más que un Padre, y todos somos hijos... aunque tengamos distintas madres, todos somos hermanos, todos somos iguales. Pero Caín es el engendro en los planes de Dios; y hay grupos de Caínes en este país’.
El 1977 a causa de la expulsión del país del sacerdote colombiano, padre Mario Bernal Londono, Rutilio Grande denunció al gobierno salvadoreño por la expulsión del padre Bernal, en el "sermón de Apopa".
Queridos hermanos y amigos, me doy perfecta cuenta que muy pronto la Biblia y el Evangelio no podrán cruzar las fronteras. Sólo nos llegarán las cubiertas, ya que todas las páginas son subversivas—contra el pecado, se entiende. De manera que si Jesús cruza la frontera cerca de Chalatenango, no lo dejarán entrar. Le acusarían al Hombre-Dios ... de agitador, de forastero judío, que confunde al pueblo con ideas exóticas y foráneas, ideas contra la democracia, esto es, contra las minoría. Ideas contra Dios, porque es un clan de Caínes. Hermanos, no hay duda que lo volverían a crucificar. Y lo han proclamado.
Un mes más tarde, el sábado 12 de marzo, el Padre Grande pasaba en auto por las plantaciones de caña a celebrar Misa en el Paisnal, donde había vivido en su niñez. Los asesinos lo acribillaron con más de 10 balas en el cuerpo; salvo una, todas eran mortales. De acuerdo con una versión, había volcado el automóvil. El anciano y el joven presumiblemente fueron matados para que no hubiese testigos. Se dice que soltaron a dos o tres niños pequeños que iban con ellos. Las autoridades no querían involucrarse ordenando una autopsia, así que los jesuitas contrataron a un médico con experiencia forense. Éste opinó que los disparos se habían originado desde por lo menos cinco lugares distintos y que el arma empleada era una metralleta usada por la policía.
El pueblo católico se estremeció hasta la medula aquel 12 de marzo de 1977, cuando por la noche se conoció que el buen Padre Rutilio Grande había sido asesinado junto a sus  acompañantes, Manuel Solórzano, 72 años, y Nelson Rutilio Lemus, de 16. Este sacrílego hecho sucedió en horas de la tarde cuando el Padre Grande se dirigía  a oficiar una misa a la población de El Paisnal.
El Padre Grande fue víctima de una cruenta emboscada  por hombres al servicio de los nefastos cuerpos de seguridad de aquella época, así lo delataron el calibre de las mortíferas  balas que se alojaron en su cuerpo, fue asesinado por aquellos que imponían el terror con la fuerza de las armas, a pesar de que sobrevivieron unos testigos de aquel sangriento hecho,  no hubo juicio  y castigo para los asesinos, todo quedó como siempre en la mayor impunidad.
“El profeta de la verdad”, de carácter cariñoso, sencillo y sensible ante el sufrimiento del pueblo de cuyas raíces se sentía orgulloso, es recordado cada año su asesinato en El Paisnal en las llamadas “TRES CRUCES”.
Monseñor Oscar Arnulfo Romero, quien el tres de febrero había sido nombrado Arzobispo de San Salvador  y en un acto de desagravio a este lamentable suceso convocó a una misa única para mostrar la unidad del clero. Esta liturgia se realizó el 20 de marzo de 1977 en la Plaza Barrios de San Salvador.

Monseñor Oscar Arnulfo Romero, tomó una postura de mayor  crítica al orden establecido y la fuerte represión que imponían los cuerpos de seguridad, el ejército, los para militares de ORDEN  y los tenebrosos escuadrones de la muerte, por lo que años más tarde fue igualmente asesinado, un 24 de marzo de 1980.